Los tics van y vienen con el
transcurso del tiempo y varían en el tipo, frecuencia, sitio y severidad del
tic. Los primeros síntomas generalmente aparecen en la cabeza y el cuello y
pueden progresar hasta incluir los músculos del tronco y las extremidades. Los
tics motores generalmente preceden el desarrollo de los tics vocales y los tics
simples a menudo preceden los más complejos. La mayoría de los pacientes
presentan la máxima severidad de los tics durante los primeros años de
adolescencia y van mejorando al avanzar hacia la fase más tardía de la
adolescencia o al comienzo de la edad adulta. Aproximadamente el 10 por ciento
de los afectados presenta un cuadro progresivo o incapacitante que persiste
hasta la mayoría de edad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario